El gato con voto

El partido francés Europe Ecologie-Les Verts es tan democrático, que ha permitido a cualquiera votar en las primarias para elegir su candidato a las elecciones presidenciales del año próximo. Solo pedía tener al menos 16 años, ser residente en el territorio nacional, inscribirse con antelación en la web primaire-ecologie.fr, firmar una carta de valores ecologistas (con un clic, como cuando uno asegura que ha leído y acepta las condiciones generales del servicio y todo eso) y pagar con tarjeta una pequeña contribución a los gastos. No exigía prueba de identidad.

Una periodista de Le Monde inscribió a su gato, con el nombre de Gaston Lecat. ¿Qué cosa más apropiada que dar el derecho de voto a los animales, precisamente en un partido ecologista? Solo hubo un pequeño fallo, pues se acercaba el límite del plazo para votar, y no llegaba la papeleta. Gaston tuvo que presentar una reclamación, que fue expeditamente atendida, y por fin recibió la papeleta a tiempo.

Faltaba escoger uno de los cuatro candidatos. Gaston no era capaz de decidirse: los cuatro proponen lo mismo. Por fortuna, la papeleta incluye una quinta casilla: “Voto en blanco”, y es la que marca Gaston, que después envía su sufragio por correo.

Hoy se cierra la votación. Con Gaston, han participado unos 17.000 electores. La elección se vislumbra muy reñida. Puede decidirse por un puñado de votos, o de gatos.